El domingo es un día especial para la iglesia de nuestro país, ya que se conmemora a una joven que entregó su vida a Dios, para que el alma de su madre volviera a los senderos del Señor.
Su mamá conoció a un hombre con el cual se emparejó sin contraer matrimonio. Esta situación perturbaba a Laura, ya que su progenitora vivía en pecado, y además, recibía fuertes castigos de parte del hombre.
Esta situación llevó a que la beata chilena le prometiera a Dios que ella sufriría todo lo que a Él le pareciera bien, a cambio de que su madre se convirtiera.