Se trata de una familia polaca que durante la segunda Guerra Mundial vivieron de manera ejemplar el amor al prójimo, al acoger a ocho judíos en su casa. Por ese solo hecho, los nazis los fusilaron el 24 de marzo de 1944, junto con los ocho judíos que se ocultaban en la casa.
El padre de familia, Josef Ulma, y su señora Wiktoria, sus hijas Stanislawa, Barbara, y Maria, y sus hijos Wladyslaw, Franciszek, y Antoni, han sido reconocido como un modelo a imitar... Conoce más, aquí…